Hay espacio entre mis vértebras.
Mis discos están hidratados.
Son esponjas embebidas
en su líquido orgánico y vital.
Y respiran.
Y tienen vida.
Y laten,
y son corazones que rodean
a mi núcleo,
a mi raíz,
a mi médula espinal,
y dan vida a mi eje
y son mi eje de vida.
Mi columna es una reina,
que tiene muchos corazones.