Vos no te fijás en mi cuerpo, sino que dibujás lo que yo transmito. Por lo tanto no importan las cicatrices violáceas en mi panza, ni si tengo bello o no en mi púbis, ni si estoy más o menos flaca.
"No es cuestión de hacer poses complicadas, porque si vos no nos demostrás que estás alegre, divirtiéndote, pasándola bien, sólo sos un robot que hace posturas difíciles y eso a nosotros no nos llega".
Yo vibro desde mi quietud impertubable, y te transmito esta melodía de violín que emana a través de mis poros, y fluye, y es acuática, es azul , es dulce, es redonda y es feliz.
Yo soy tu musa inspiradora.
Y vos dibujás mi corriente de vida.